San Gabriel, mayo 2
El lugar ya no es seguro,
he ido tomado de otra mano distinta a la tuya,
mi piel no se pone de gallina,
es solo otra mano, sin respuesta.
Como quisiera tu mano fría, delgada y blanca,
como quisiera que todo yo cambie,
el sentirte cerca daba una sensación extraña,
no sé si de incomodidad o quizá de alivio,
aun siendo un lugar extraño
lo sentía como mío.