Secreto captado
¿Tienes tiempo?
(Es una buena pregunta)
¿Yo tengo de eso?
(…¿realmente lo tengo?)
Estoy en ese dichoso “momento dorado”
Aunque solo veo la luz de mi ventana,
De ese balcón que me llama hacia ella
Para contemplar su cálido abrazo —frío y brutal—.
Me sobra tiempo.
Pero me siento ahogada.
(¿Me sobra el tiempo?)
¿Por qué no lo siento?
Debería,
(¿debería?)
Me preocupo, aún más…
Soy el barco que pierde tripulantes,
El ancla que flota,
La vida que se aferra a almas rotas
Pero con un gozo casi contagioso.
Me quedo para no oír los «¿por qué?»
No me voy para evitar los «¿por qué?»
Me quedo porque me aferra el querer.
Estoy porque irme no me llena;
Saber que dejo puñales me destruye.
…pero quedarme me hace
Un agonizante en mente y alma.
Ser buena para muchos
Pero mala para el que predica;
Mala para el todopoderoso en su iglesia,
Buena para el que vive y come en mi mesa.
Soy buena pero mala.
Así me define mi cabeza.
Sé lo bueno.
Sé lo malo.
Sé lo correcto
Y lo inhumano.
Pero la democracia ya no está en mis manos.