¿Qué pacto hemos decidido tener?
Un par de cuerpos frente a lo abisal, la punta de los dedos dejando deslizar palabras que se graban en la piel.
Un cincel que golpee sin ton ni son todos nuestros males, que muestre nuestras aberturas cristalinas.
Enfrentarnos a lo vulnerable, ser lo vulnerable.
Habitar en un zarzal de dudas, bregar con lo impensable.
Seguir, proseguir, avanzar.
Y en medio de la desventura: soñar.