el brujo de letziaga

Amanece en el tren.

Amanece en el tren,
y una gran colección de instantes
pasan por mi mente...
Incluso tu sonrisa de entonces...

 

En el tren ya no va nadie,
y observo que el paisaje me mira diferente,
desde nunca para siempre,
cada poema me traslada hacia poniente...

 

Mis manos ya se mueven a lo torpe,
y el mundo no acude,
a mi espacio apartado que languidece,
donde mi pulso se escurre...

 

Amanece en el tren,
mas tu fotografía, a mí te devuelve...
Dios sabe dónde,
estará tu sonrisa de entonces...