En este síndrome de ideas...*
¿Quién está seguro con tanto ideal?
¿Quién puede vencerse a sí mismo?
¿Y dormir como quién duerme
sin techo y vuela sin lecho?.....
(Sobre un río gris o
un mar sin latidos).
Bajo el círculo de estupefactas
y estrujantes verdades...
¿Alguien puede saberse sin dueño
o dueño sin saber mismo de sí?
Hernán J. Moreyra