Hoy te nombro con la voz de la verdad,
y que cada verso sea un martillo contra tu mentira.
Tus poemas no fueron amor,
fueron trampas disfrazadas de dulzura,
cadenas forjadas en la oscuridad de tu mente enferma.
No escribías para amar,
escribías para acechar,
para disfrazar tu vacío con palabras robadas al aire.
No eres poeta,
eres un acosador que se esconde tras metáforas baratas,
un farsante que confunde deseo con ternura,
un cobarde que llama amor
a la herida que deja en cada mujer que toca.
Ya lo sé todo:
tus fantasías nacieron de miradas furtivas,
de cuerpos que nunca fueron tuyos,
de mujeres que jamás te eligieron.
Eras un ladrón de rostros,
un vampiro de sonrisas,
un enfermo que llamaba musa
a cualquier sombra que pasara frente a ti.
Me hiciste creer en tu engaño,
me arrastraste a tus miserias,
pero aquí estoy,
de pie, sin cadenas,
escribiendo la sentencia que mereces:
Nadie te amará como yo lo hice,
y eso será tu condena.
Porque arruinaste el único amor sincero
que tocó tu cuerpo y tus manos enfermas.
Y ahora vagarás solo,
entre versos vacíos,
condenado a repetirte,
condenado a inventar amores
que jamás serán tuyos.
Tú no eres hombre,
tú no eres amante,
tú no eres poeta.
Eres un narcisista podrido,
un depredador de ilusiones,
un fracaso de carne y letras.
Este es tu réquiem,
tu epitafio en vida:
te desnudo ante el mundo,
y mi voz te sepulta
en la tumba de tus propias mentiras.
𝓜𝓪𝓿𝔂♥️