Cura las heridas de este día triste, hace florecer mi sonrisa y en sus besos me imprime la felicidad.
Me ama. Una locura en el calendario de octubre.
Volamos en su cielo, juntos en la arena vemos morir el sol. Me río con sus chistes tontos hasta que me duelen las lágrimas.
Amo sus abrazos, sus mejillas rojas cuando la llamo bonita y en sus ojos veo temblar las estrellas.
Me ama, lo sé. Me lo clava en el cuerpo,
con esa mirada, un escalpelo frío en mi alma.
La amo. Dios, la amo.
Pero el miedo a perderla me hiela el habla.
Las palabras, esas pequeñas bestias muertas,
se me amontonan en la boca.
Me dice \'te amo\' y yo, tan tonto contesto, un \'me siento muy amado por ti, mi amor\'.
No hay cómo decírselo.
El amor no basta. Nunca basta.
m.c.d.r.