MarthaElena

EL DESAYUNO

EL DESAYUNO

Por MarthaElena

 

En la soledad de mi estancia,

llegó la hora temprana,

en que el desayuno me llama,

en que los pájaros con su cantar

anuncian el nuevo día.

Y antes de que el tiempo transcurra

y que el ayuno prosiga,

he de preparar mi vianda,

he de darle sustento a mi ser,

porque lo que no debo perder

es el alimento primario

que precede las horas del día

de mayor actividad y gasto de energía.

Llegó la hora de desayunar y observo

que entre escritos y sueños del alma,

el caos impera en mi mesa.

¡Ay, madre mía!, cómo extraño,

cuando en la infancia añorada

iba a una mesa servida

y hoy veo con sorpresa

que olvidé llenar la nevera.

Aun así,

gracias le doy a la vida.

3 de octubre de 2025