Antonia Ceada Acevedo

Pasa el tiempo

No hay tiempo que ganar

Cuando  al prender  la luz

Nos obstaculizan  breves pensamientos

Prediciendo acontecimientos dormidos.

Pasan los momentos

Mueren más células.

Pasan las etapas

Nos van doliendo los huesos

de tanto peregrinar por  los caminos

donde las rosas y cicutas  nevadas.

Pasan las estaciones

y  al mirar a los hijos

reparas en tus manos arrugadas,

hoy, un poco más, algo más,mucho más…

Y quedan los espacios, vacios  eternos,

donde no anidaran  jamás las ánimas aquellas

con  quienes cruzaste alguna mirada;

y recuerdas, deseando abrazar al pasado,

Sujetando  en la mente débiles retratos

resquebrajados  por el desconsuelo.

Pasan las oportunidades

Y  te callas por miedo

a  la reacción, al eco, al efecto,

Y no mencionas un te quiero.

Pasa la suerte

Como estrellas fugaces

Que debiste  palpar

Cuando  gozabas  de la noche.

 

Pasa la existencia…

Y no has notado que has estado.

 

Antonia Ceada Acevedo ©