BASTA UNA MIRADA
Hay ojos que confiesan
sin preguntar,
que acarician despacio
sin tocar.
Te nombran en silencio,
te desarman así…
Y lo que eras sin ellos
ya no importa aquí.
Porque hay miradas breves
que son eternidad,
tinta sin palabras,
verdad sin hablar.
En un parpadeo,
cambia la piel:
lo que viene después
empieza en ella.
– LMML.