Cuando te miro,
veo detrás de ti ,
me dijo ella sin pensarlo
y cuanto más te miro
veo más lejos.
Si te quedaras quieto para siempre,
vería hasta el confin,
vería al hombre nuevo,
nacer en la distancia.
Moví mis ojos,
de un lado para otro
y en cada movimiento,
ella desesperaba más y más.
Salté sobre mis ojos,
corrí por los suburbios de mi piel,
para dejarla ciega.
Ella me dijo, tranquilamente,
sin mirarme:
cuando te toco,
siento que el Universo se parte,
para nacer a la distancia.
(Del libro Amores Perdidos; Ed. Grupo Cero)