Dónde encontrar esa paz
que los campos nos brindaban,
cuando las aves cantaban:
no te alterabas jamás;
reinaba la libertad,
se purificaba el alma,
entre la sonora calma
de una sana intimidad;
hoy predomina lo gris,
la ansiedad que te mata
con insufrible tensión,
nadie puede ser feliz
con la constante amenaza
de deprimente prisión...