¿Y qué esperas de mi mujer amada
si con nombrarte apenas te diluyes
cuando corres, cuando saltas cuando huyes
sin rumbo, delirante y desbocada?
¿Y que esperas de mi mujer cansada
si mirarte a los ojos se hace eterno
sin tu calor mi vida es un infierno
perdido entre las fauces de la nada?
¿Qué voy a hacer sin ti esta primavera
cuando las flores muestren su esplendor
cuando te encuentres lejos de mi vera?
¿Y qué haré si no tengo tu calor
navegante en un mar de luna llena
naufragando en tu playa por error?