Destellos...
Lentas corrían las horas
en que niñez transcurría
luego, perdidas de prisa
entre deporte y lectura.
Por noches adolescentes
que días siempre juntaban
labios candentes llegaron
se fue pudor e inocencia
bajo sus faldas traviesas
supe de ansiado placer.
Móvil ya vibra.. presente
trunca razón y recuerdos.
José.-