Anita milanesa

Rosado

Rosado

Parece que los árboles han cambiado 

La gente la ha juzgado 

A la niña extraña con ojos de antaño

Esa amante de las arañas 

Que entre risas y marañas

Nadie acompaña

Arboles rosados

Han sido sus sueños destrozados?

Por reyes que vemos despiadados.

Ella compleja y acomplejada 

Pero su sonrisa no es reflejo de su alma

Cosa que solo nota la soledad del alba 

Siendo esta su única compañía 

Luz de noche, rayos de día 

Extraña en si misma ellos dirían 

Pues ama como ninguno lo haría 

Tan fuerte que su vida sacrificaria

Ella tan dulce que entre serpientes dormiría 

Regocigada de alegría 

Y al son de esta triste mediodía 

Su alma, cual niebla desvaneceria.