Tus cabellos
fiel marco dorado,
tu rostro de seda,
tu piel de jazmín.
Tu perfume
me embriaga en la noche,
se cubre de flores
y amor el jardín.
Tus palabras
se clavan cual flechas
sagradas, de oro,
en mi corazón.
Tus miradas
están en mis venas,
que sangran de amores
por ti, de pasión.
Ni mis frases
podrán expresarte
que eres mi vida,
mi luz y mi amor.