Lucas Gress

Que me perdone

Que me perdone el tiempo

Que me perdone tu vida 

Y el silencio, que me perdone

por llenarlo de recuerdos.

 

Que me perdonen tus padres

y las promesas.

Que me perdonen las rosas

que nunca llegaron a tu habitación,

que me perdonen las caricias

y los besos

y las buenas noches

que ya no serán más.

 

Que me perdonen las palabras,

los adjetivos y los verbos que ya nunca te dije

Que me perdonen los sueños

los viajes no hechos

la vida que nunca hicimos.

 

Que me perdonen los recuerdos, y

los regalos escondidos en un cajón

que me perdone la música

que ya no suena igual que nunca

y los poemas 

que ahora sólo hablan de ti

que ahora sólo hablan de mí

pero que no hablan de los dos

que me perdone Dios.

 

Que me perdonen tus esperanzas

que me perdonen tus días junto a mí

y tus días sin mí

que me perdones tú

que me perdone yo

 

Que me perdone por soltarte

por dormir, por caer 

que me perdone por dejarte ir

aun cuando todavía no te habías marchado.

 

Que me perdonen los hijos que no tuvimos

y la muerte que no nos esperará al mismo tiempo

que me perdone la ceremonia

en la que no estaremos juntos

que me perdonen sus invitados

los votos que permanecerán en un baúl

la música que no sonará en el vals celebrado.

 

Que me perdones tú

que me perdone tu vida

por haberme ido sin querer

sin haber avisado

que me perdone por volver

cuando tú ya te habías marchado.