De pequeños,
Algún amor, tenemos,
Olvidadizo a veces,
Otras una obsesión,
Este poema,
Ocurre en un colegio,
Lugar donde se encuentran,
Y estudian.
Una pareja de niños,
Ella morena,
Él pelirrojo,
En el mismo curso,
Con sus casas,
Una al lado de la otra,
Todos los días,
Para ir y volver,
Juntos iban y venían,
De sus compañías, disfrutaban,
Hasta que un día,
El destino los separo,
El niño,
A otro colegio fue,
Tristes se quedaron,
A un con la promesa,
Que a visitarse irían.
Eso no ocurrió.
El tiempo paso,
El niño, se hizo hombre,
Y la niña mujer,
Tras terminar los estudios,
El niño hombre,
Su coche cogió,
Para a ella buscarla,
Y ella,
Lo mismo hizo,
Se buscaban por doquier,
Sin resultado,
Pero la casualidad,
Les reunió.
Sin saberlo,
En el mismo hotel,
Se alojaron,
Una habitación,
Al lado de la otra,
Ellos lo desconocían,
Al salir para cenar,
A la vez salieron,
Sus ojos,
Fijos se quedaron,
Como si fuera,
La primera vez, que se ven,
Que se conocen,
Un eterno abrazo,
Surgió de los dos,
Y en él, se fundieron,
Con un sentimiento de amor,
Largo rato duro,
Despegarse, les costó,
Su química,
Se activo,
En la cena,
Juntos lo hicieron,
Recordando viejos tiempos,
Una vuelta dio,
Con ella, acompañado,
Bailaron, bebieron,
Y disfrutaron de la noche.
Entonces el destino quiso,
Que, en el mismo cuarto,
De él,
Se despertarán,
Muy acaramelados,
No querían alejarse,
Y compartir su vida,
Se amaban.
El amor de colegio,
Retorno a sus corazones,
Sin pensarlo,
Juntos vivieron,
Una empresa crearon,
Las nupcias pronto llegaron,
Y cada día festejan,
Ese amor alcanzado,
Desde su niñez.