Crucito Bautista

La sepultura del olvido

Castigo más severo es el olvido,
lapida nuestra vivencia doliente.
El tiempo es tan cruel con su andar latente,
entierra indicios de un amor herido.

Las sombras de un pasado ya perdido,
se ahogan ecos, una voz ausente;
la remoción del rastro en el presente
vacío vuélvese en jardín florido.

Volcán sin llamas en el fuego helado,
fulgores, sombras que por fin devoran;
anhelos que escabúllense en tinglado,

deseos congelados que así imploran.
En oscuridad del orbe cansado
cenizas del silencio se atesoran.