Roel De Olvido

HAMBRE

No puedo callarme,

no puedo dejar el intento,

continuarme en otras voces

si es necesario.

 

Pero lo que escribo

ya no tiene significado de grito,

sino más bien de un llanto

que llora por sí mismo,

que su pena y quebranto

es el mismo penar que el penar

de un viejo prieto y arrugado,

que ha muerto de hambre

en el mercado donde nuestra tierra

le hace homenaje a un héroe

que también era prieto,

pero este era presidente.

 

¿Cuándo permitimos

nosotros los mexicanos,

que un anciano fenezca de hambre

en un lugar donde fecunda

el plato de frijoles y donde habita

el nombre de Benito Juárez?

 

Mi llanto vano ya no es por el viejo

vacío y olvidado,

vaya a saber usted ahora en donde

se encuentran sus hijos desamparados,

pero mi llanto no es por el viejo

sino más bien por nosotros los mexicanos

que nos estamos matando entre hermanos.