Hoy me levanté
con el alma en gris;
abrí las ventanas,
¡como llovía!
Pensé en tu recuerdo,
repasé mi vida:
tiempos buenos hubo,
aunque se rompían.
Gotas del ayer,
mojando mi piel,
ya no duelen más,
solo recordé.
Gotas del ayer,
que vienen y van,
como hojas
al viento,
mejor soltar.
Salí a la calle,
busqué la vida;
hice lo que pude,
y se fue la lluvia.
Llegó la noche,
se apagó el día;
me fui a la cama,
pensé en ti...
ya no dolía.
Gotas del ayer,
mojando mi piel,
ya no duelen más,
solo recordé.
Gotas del ayer,
que vienen y van,
como hojas al viento,
mejor soltar.
Y aún,
con todas mis ganas,
con fuerza, metas por cumplir,
y montañas
por escalar,
sin dejarme rendir...
Hoy me levanté
con el alma en tono gris;
llegó la noche
y se fue el día.
Conté cicatrices,
pasé revista;
pensé en ti...
ya no dolía.
Soñé despacio,
borré lo triste y
olvidé el día.
Se fue la herida,
volví al presente,
volví a la vida.
Gotas del ayer
mojando mi piel:
fueron otros tiempos,
solo recordé.
Gotas del ayer
que vienen y van,
sin pena ni gloria,
solo avanzar.
Porque nadie es lo que es,
sin los días del ayer;
como nadie será jamás,
sin los días por venir.
Hoy ya no soy gris,
soy hoja al viento,
ando libre y suelto.
Forjo mi destino,
conquisto mi tiempo,
y sin gotas del ayer...
¡Exprimo mi vida!