Soy la sombra
de un pensamiento,
que me lleva lejos,
sin pausa, ni tiempo.
Soy la que fui,
la que quise,
la que todavía
sueña ser.
Creo en el
Eterno, en
lo inconmensurable
del universo,
en qué todo
llega, pasa,
sucede, porque
así debía ser,
porque eso es
lo correcto.
Creo que aunque
no te vea,
te siento, que
aunque no te
busque, te encuentro;
que, algún día
hallare el
lugar al que
pertenezco, y,
por fin podré
decir: valió
la pena el
esfuerzo.-