piotr antonin

LA GRIETA LUMINOSA

Desde la manifestada existencia, hábitat del ser pleno

desde la excelsa contemplación, donde lo invocado era tierra fértil y raíz

acaeció un evento disruptivo

la herida de tiempo evolucionó a desconcierto

el núcleo de lo esencial viró a lo nebuloso.

Espejos ciegos difuminan las imágenes,

se ausenta el eco de la noche ,

vibra en las ondas de la nada lo no dicho.

Pero en la luminosa grieta, algo germina sin nombre

y genera espacio positivo a las ansias.

En ocasiones, el silencio no es ausencia

sino el espectro donde el sentido se reordena.