Roberto D. Yoro

HORMO LOCO

HORMO LOCO

 

Cuando el cuerpo avisa sin previo aviso,

y el alma se agita sin justa razón,

el juicio se esconde bajo el narcotismo

de un pulso salvaje sin dirección.

 

Hombres y mujeres, en plena madurez,

sufren el embate del cambio interior;

la chispa se apaga, o enciende al revés,

y tiemblan los lazos con falso ardor.

 

Lo que era ternura se vuelve reproche,

lo firme, quebranto; lo dulce, temor,

y aun en amores que alumbran la noche,

se cuela el hastío sin compasión.

 

¡Hormo loco! Que pone a prueba el pacto,

y enreda pasiones, y azuza el error…

Mas hay esperanza, conciencia y contacto

con lo más profundo del buen corazón.

 

Si el alma respira con fe y coraje,

si el ser se alinea con gracia y verdad,

puede el que ama vencer su oleaje

y hacer de esta etapa una gran libertad.

 

No es el final, es nuevo comienzo,

crisol donde arden el oro y la fe;

la mente madura, el espíritu intenso,

dominan al cuerpo, venciendo al porqué.

Roberto D. Yoro

Olanchito, Yoro, Honduras C.A.