MASCARAS Y DISFRACES
Carlos Figueredo Álvarez. Junio 2025
Como si formara parte del grupo de veladores
aguardaba el tren en la última estación.
Mi atención la ocupaba aquel bello
retrato de la niña que teje,
que la revista “Introspección” me regalaba.
Tiempos pretéritos a mi memoria llegaron
añoré de mi infancia, la libertad.
Escenas, anécdotas y recuerdos florecían
y me dije: si el buen Dios me diera
la oportunidad de renacer en la encrucijada,
como un alba en el crepúsculo del alma,
abandonaré las máscaras que nos ocultan,
evitaré todo lo que oculta mi alma,
ya no habrá el secreto en mis ojos.
Cuando llegue a la última estación
quisiera renacer en tus ojos,
dejar de ser el disfraz de los vivos
y en confesión me diré: yo lo se:
fui alma en la oscuridad,
ahora no soy más de lo que ves,
y tampoco tengo una sonrisa engañosa