Su Nombre
Cabellos de miel donde amanece el cielo,
ojos de bosque que nunca se termina,
su piel, un suspiro tibio de canela,
y yo… sin el nombre que a mi amor destina.
Lo busqué en el murmullo de la marea,
en el lento girar de lunas y estrellas;
mas frente a ella, la voz se me caía,
y el miedo sellaba todas mis puertas.
Confié en mi amigo la llave del secreto,
él fue… y en sus ojos prendió su alborada;
tomó de sus labios la risa que amaba,
y mi primavera quedó deshojada.
Hoy vi sus cuerpos atados en un beso,
y el nombre que un día encendió mi desvelo
lo entierro en la noche, donde no hay regreso,
allí donde mueren los su
eños eternos.