Parece que finalmente las cosas comienzan a ponerse en orden;
que mis pensamientos
y mis sentimientos
vuelven a su sitio.
Puede que la mayor parte del tiempo esté bien,
aunque a veces la tristeza me invade,
supongo que eso está bien,
supongo que es parte del proceso.
Pienso que crecí siendo alguien melancólica.
Me aferro a momentos,
a lugares,
a personas
y a sentimientos,
es así como terminé en esto.
Probablemente
o
seguramente
yo misma me metí en esto.
Me aferré a un sentido de pertenencia que no era mío y quise ser especial en donde sólo había costumbre...
eso fue lo que pasó.
Por lo menos ahora, tengo la seguridad de que estaré bien
y que no necesito buscar encajar en donde sí pertenezco,
que cada día puede ser especial
y cada momento,
que incluso yo puedo serlo...
especial,
melancólica.