Lincol

LA HOGUERA DE TU PIEL

 

LA HOGUERA DE TU PIEL

Enséñame a quererte,
con la luz de tu verdad,
desátame en tus brazos,
hazme arder en tu humedad.

Bebe de mi querer,
sacia en mí tu sed,
que mis suspiros son
fragancia de tu piel.

Aprisióname en tu pecho,
entre las paredes de tu corazón,
donde el tiempo se hace eterno
y no existe la razón.

Enséñame a amarte
como lo sueñas, como lo anhelas,
que yo daría sin medida
hasta la última gota de mi estrella.

No es juego lo que nos une,
es fuego, es realidad,
una hoguera que no apaga
ni el tiempo ni la distancia.

Fundido en tu esencia,
te ofrezco mi ser entero,
cada latido, cada herida,
cada verso verdadero.

Y si el destino lo permite,
arderemos sin cenizas,
porque este amor no se agota,
solo se eterniza.

– LMML.