Moliner Vallés

Esperanzas

Cuando estemos entretejidos, sueltos entre la montaña, alistados en los matorrales. 

Cuando nuestras piernas se rasguen con púas y espinas, donde la vista se pierde en las alturas terrenales. 

Cuando por las fosas el aire esté limpio y los ojos no se pudran por luz corrupta.

Cuando no haya más muros de hormigón y asfalto, ni cielos encapotados, ni gritos por todos lados.

Cuando todo pase, cuando suceda. Quizá quede o brote, algún ser humano.