Tu sonrisa, Dunia, faro en mar de cristal,
luz que me guía en olas de un vaivén celestial.
Cada curva en tus labios, suave brisa en alta mar,
que calma mi tormenta y me invita a soñar.
Es refugio en mi costa, remanso de verdad,
pintura viva y calma, coral de eternidad.
Cuando ríen tus ojos, el horizonte calla,
la tristeza se disuelve en espuma que no falla.
Eres esperanza salina, eco de alegría,
manantial de serenidad que nace cada día.
Tu risa es puerto tierno, oasis en la mar,
lienzo de sueños profundos que no quiero soltar.
Ríe, Dunia, sin pausa, que tu luz es mi guía,
brújula en mares vastos de noche y de día.
Que en esa sonrisa eterna pueda siempre mirar
el tesoro más puro que aprendí a amar.U