Me haces sentir tan bien,
como si tus manos tejieran calma
en las orillas de mis días.
Esta sensación de enamorada
no es un incendio que me queme,
es un amanecer suave
que me envuelve sin prisa.
Para mí, eres paz en mi vida,
un silencio que no asusta,
un suspiro que me recuerda
que, aun con el mundo girando,
puedo quedarme quieta
en el refugio de tu amor