No sé dónde empieza el cielo o termina el mar.
Ni dónde empiezan los signos que demandan amar.
Los deseos azules y grises se cruzan en gran extensión y se beben -
Acostado en el movimiento una hoja de acero crudo aún más tacaña de palabras.
¿Cómo separar lo que baila en tu vista y la emoción o la paz de un músculo de la luz?
P. SABAG