MARINER

EN LA TIERRA DEL SOL

En la tierra del sol y el monzón,
donde el río sagrado canta su canción,
hay pequeños ojos llenos de luz,
que corren y juegan bajo el cielo azul.
Con sueños tejidos de hilos de seda,
y risas que suenan a campana queda,
crecen entre templos, flores y color,
con un corazón lleno de inmenso amor.
La magia de historias, que la abuela contó,
y el sabor de un dulce que la madre horneó,
en cada mañana, un nuevo amanecer,
la India despierta para crecer.
Así, pequeños príncipes y princesas de sol,
comparten un mundo, bajo el mismo arrebol,
donde cada gesto es como una flor,
y cada niño es el futuro y su esplendor.