Carlos Andrey Vargas Araya

Algo Salvaje dentro de mi

Hay algo salvaje dentro de mí,

una bestia que duerme en las profundidades,
encadenada por años de cordura,
domesticada por el peso de las costumbres.

Pero cuando rozan mi fragilidad,
cuando los dedos crueles hurgan en mis heridas,
despierta el animal que creía muerto,
y sus garras arañan desde adentro.

No conozco bien este territorio grotesco,
estas tierras áridas donde la ira florece,
donde el hombre civilizado se desploma
y queda solo el instinto, desnudo y feroz.

¿Qué puede hacer el ser humano
cuando lo empujan contra la pared?
¿Cuándo le quitan todas las máscaras
y lo obligan a mostrar sus colmillos?

La presión moldea diamantes,
pero también desata huracanes.
Y yo, que me creía manso,
descubro que también puedo rugir.

Algo salvaje vive en mis venas,
algo que no se deja quebrar,
que emerge cuando todo se agrieta
para recordarme que aún estoy vivo.

No es maldad lo que despierta,
es supervivencia en estado puro,
la respuesta primitiva del alma
que se niega a ser destruida.

Dentro de mí habita un lobo
que ha aprendido a caminar erguido,
pero que nunca olvida
el sabor de la libertad salvaje.