El aire me circunda sin ceremonia,
atravesando mi asfixia,
en su fiel realidad está la transparencia...
¿Se podría escribir un poema?
De buen grado o por fuerza,
llenando y vaciando mi caja torácica,
cada mes y cada día,
y yo escribiendo en el papel cada palabra...
En el mundo tu existencia,
me trae un mensaje que nadie me enviaría,
frágil de estructura,
a mi respiración ya entrecortada...
Sin tener voz propia,
conectas en libertad con la naturaleza,
en un ciclo que no acaba...
¡Ay, tu beso continuo en mi boca!