Manu cramps

Obsesión

 

 

Me atrapa una obsesión sin avisar,

se cuela por las grietas del sentido.

No puedo retenerla, ya ha invadido,

se queda en mí, me empieza a gobernar.

 

No hay tregua. Solo hundirse y esperar,

ver cómo se derrumba lo vivido.

Me muerdo por no herir, por no haber sido

capaz de resistir sin estallar.

 

Me cambia el cuerpo, el gesto, la mirada,

me vuelve ese que nunca quise ser.

Y siento que mi vida está parada.

 

No queda más que herirme sin querer,

luchar con lo que brota de la nada

y ver si aun queda algo

en qué crecer.