Deberíamos de aprender, según ellas, como dicen la comadrejas del pueblo, con sus vestidos desteñidos y el rebozo en la cabeza, son esas las que se detienen cada mañana, al cantar el gallo en las callejuelas, empedradas por donde caminan también , los hombres que con su talego y sombrero van rumbo, a la cosecha , algunos trabajan , pa´otros , otros para si mismos y ellas murmuran,...
...mientras las comadrejas, así les nombran los del pueblo, se juntan de dos o tres para , hablar de lo ajeno , murmuran en voz baja,
será que imagino, o en todos lados sucede lo mismo , que se juntan para hablar del prójimo sin reparo. tanto como si tuvieran la verdad en la mano
... y asi pasan varias horas horas , hasta que recuerdan que dejaron, el fogón encendido, queme y queme leña , esas comadrejas que no dejan títere vivo, en el pueblo.
Y luego porque las señalan como chismosas , sin ningún oficio..... nada que asemeje , lo que pasa en cualquier vecindario, que no sea un pueblo inquieto, donde al Alba canta el gallo, donde la luna mece de noche los sueños,
MISHA
lg