Siento la alegría, viendo por la calle, pasar, actividades alegres y yo con cara dura la dejo pasar, pues en mi dulce morada me está esperando como siempre mi amada soledad.
El tiempo pasa y no doy vueltas atrás, un amor que domina mis pensamientos va quedando atrás y el amor que yo sentía débilmente, ese mismo amor, se apagará.
Mi amada soledad, dulce compañía, que casi siempre me das mis alegrías cuando débil, yo estoy. Soledad, mi amada soledad, compañía grata hasta el final.