La gente, cada vez más,
no suele hablar con el que lleva
dentro. Siente ese silencio,
padece ese miedo.
La gente no se acuerda de
lo que has dicho,
sino de lo que les ha hecho sentir.
El pasado de cada cual es
un país cualquiera
al que nadie quiere ir.
Todos tratamos alguna vez de
ser lo que no somos.