Hernán Mejía Silva

EL CAMINO

La fuerza va creciendo,

entre el dolor y el gozo,

¡No!, no todo el dolor es malo,

no todas las lágrimas queman,

no todo el sudor es miedo líquido…

 

Velocidad, la propia y prestada,

con el pasado llamando,

el pasado es una rueda que suena,

gritando libre por el camino,

y es ese sonido lo que termina por guiar a las estrellas.