Miguel Rojas

la musa calla y el poeta clama

Oh musa perfecta
que a almas humanas inspiras,
te escribo este poema tan puro
como tu belleza natural.

Eres aquella deidad,
hija del gran Zeus,
a quien socorro por dones
cuando mi inspiración se ausenta.

Y sí… te hablo a ti,
Calíope querida,
musa del gran poeta Homero,
a quien le diste fama
por toda una vida.

En esta noche oscura,
donde la ignorancia abruma,
te invoco a ti, hermosa Calíope,
para que enciendas mi pluma
en esta soledad sin fortuna