Ni te conozco,
posta,
no sé nada de vos flaca,
no me vengas
con esa trillada
y soberbia línea
de “No me gusta perder a nada”
¿A quién le gusta
perder en algo?
A nadie,
es la frase
más “sin sentido”
que debe existir.
¿Qué me vas
a decir después?
Para, no digas nada…
yo te la adivino:
“Me gusta cuando gano”,
Y si…
Claro…
¿A quién no le gusta
cuando se gana?
No se si me queres pelear…
si buscas seducirme,
si queres que hagamos equipo…
o si nos vamos a batir a duelo,
Igual,
nada…
Y todo a la vez.
Como dirías vos.
que tenes
esa simpática
manía de contradecirte,
a vos misma,
en una misma idea,
incluso en una misma línea.
“Mira que me encanta ganar eh,
pero (ese “pero”,
que dinamita todo lo antes dicho,
y lo borra sin borrarlo)
Ya no sé si quiero ganar…
si eso implica que vos pierdas,
yo con vos
lo quiero empatar todo.
Siempre.
¿Te va la idea,
de ser mi empate
para que de esta manera
ganemos siempre los dos?”