Los tiempos se hacen inciertos
y aun así, descanso en tu amor
que me hace sentir descollante;
la gente habla sin fundamento,
se burlan y enjuician sin saber
que cada quien porta su escudo.
Atesoro dentro de los bolsillos
los besos que se descuelgan…
de tus comisuras, se decantan
sin rumbo; llenan los espacios
que fueron y se han desdibujado
y solo arden con tu ánimo ávido.
Solo por ti, no he perdido la fe…
que se derrite ante la inhumanidad
y tú la haces renacer con la luz
que brota de tus ojos marrones…
se me están acabando las ganas
de amar, pero tú siempre me redimes…