Un galeón,
Con la vela,
Con forma de cruz,
Navegando entre impuros,
Que, convirtiendo,
Tiene como misión,
Poco a poco,
Invadiendo terreno,
E infieles transformando,
Transmitiendo la fe,
Y las enseñanzas que dios,
Nuestro señor nos enseñó,
La iglesia se llenada,
De creyentes,
Recibiendo el cuerpo de cristo,
Y la sangre,
Sanando nuestras almas,
Perdonando nuestros pecados.
El poder de dios, nuestro señor,
Infinito es,
Y a todos nos llega,
Creyentes,
O no creyentes,
Que al final,
Creyentes se vuelven,
Dios es bueno,
Sabio y sanador,
De tu alma y corazón,
Y al cielo subirás,
Si creyentes te vuelves.