Isgo

Azul en Rojo

Nunca te he visto,
y ya me gustas.
No te conozco,
pero me asustas.

¿Será esto posible,
siempre en mis sueños?
¿Podré, en silencio, resistirme
a ser el mejor de tus dueños?

Eres todo imaginación,
en mi inmensa confusión.
Nos une más que el texto y arte;
me gustaría hoy poder alabarte.

Algún día sabremos la verdad,
nuestra única identidad.
Es esencial la honestidad,
porque herir no tiene impunidad.

El destino hace juegos,
con aguas o fuegos.
Dar y recibir a la distancia,
sin poder dejar constancia.

Desconocidos en contacto;
el misterio es nuestro pacto.
Honor quedará intacto,
debo hacerlo con mucho tacto.

Le escribí sin invitación,
me contestó con rapidez.
Ahora espero su atención,
sobrio o con embriaguez.

Su vida me intriga,
su poesía me inspira.
No quiero ver esa salida,
o correr en mi huida.

El mensaje es cuestión de ver,
alguien especial lo debe leer.
Hazmelo, por favor, saber
si lo pudiste comprender.

Te lo mando a ti o usted,
sin mencionar tu nombre.
Sabrás que soy aquel hombre
que en su mente está a tu merced.

Me despido de la pluma,
ya entrada la noche y la luna.
Mañana otro secreto contraste,
buscando si algo dulce me enviaste.