Ricardo Castillo C.

SUEÑO CON FECHA DE VENCIMIENTO

Eres un sueño con fin marcado,
una tormenta que ha de pasar.
Eres el fuego que quema mi alma,
pero las cenizas se han de esfumar.

No eres mi historia, no eres mi vida,
eres el verso que morirá.
Eres la estrella que, en la distancia,
me dio un instante de eternidad.

Pero los sueños, por más hermosos,
tienen su hora para acabar.
Y aunque te ame sin resistencia,
sé que la aurora nos va a borrar.

Así te dejo, sin despedida,
como un milagro que se extinguió.
Fuiste mi todo por un momento,
y ese momento… ya terminó.