rosi12

Una noche en la ....

Salieron de ver una obra de teatro, algunos conmocionados por lo que vieron, ese grupo heterogéneo anónimo, que puede haber salido alabando o  vilipendiando la misma obra.

Tenemos un par de ojos, pero un solo corazón. Asi que cada cosa que vemos, será percibida como almas que somos una al lado de la otra, así que se hace muy trivial, que luego se trate de homogeneizar comentarios.

Se publica en la cartelera el resumen de la obra, y se puede leer aquellas personas que le ponen unas cinco estrellas. Y aquel que le ponga una , tendrá que sustentarla,  el de las cinco se sabe que es el amigo del que actúa o dirige...

Se ha desvalorizado mucho, el trabajo del actor, por lo que se hace más alusión al gran ego que debe tener...que por algo se sube a las tablas.

Sin embargo no es necesariamente, lo más importante de hacer o participar en un taller de teatro,  sería mostrarse ante un público. El momento de ser otro, como sucede en el teatro, puede ser tan sanador, como para otro quizás sea hacer deporte. Basta con que esa actividad le provoque placer. 

En los países donde el teatro es un lujo de muy pocos, porque se hace por el mal llamado amor al arte, ya que se considera un arte menor. Los actores, trabajan de cualquier otra cosa, para vivir y eligen actuar, por el ejercicio de jugar a ser ese otro...

En español se utiliza el verbo actuar, y en otros muchos es jugar. 

No hace tanto , vivimos una pandemia, y los últimos en reabrir las puertas fueron los teatros. 

Hay una frase de Lorca , medio pan y un libro.

Nunca mejor resumido de como  alimentarnos- Tanto de aquel que se sube, para hacer pensar entretener o lo que fuere, pero nadie sale de la sala a oscuras, sin algún tipo de modificación. El actor dirá que por más que se haya hecho la obra mil y una vez, y ya podría hacerla dormida por la cantidad de repeticiones. Ninguna función será igual. En el cine una toma sale mal y se repite, se busca la mejor.

En el teatro han pasado muchas cosas, que si se tiene oficio, hará que salga lo mejor, para que no se note, la falla.

Un traspiés, o un mínimo detalle fuera del libreto, será únicamente para el actor, el único que lo sepa.

Los que vamos a ver una pieza, por lo general es porque nos gusta un actor, o hemos leído algo que nos interesa.

De las obras clásicas se han hecho un montón de versiones, y se vuelven hacer. Porque las historias más o menos pueden ser las mismas, según como se cuenten y la creamos, se producirá esa magia, que dura tal vez una hora.

Pero es fruto de muchas horas de ensayo, de otras privaciones. El que canta deberá cuidar más que nada su voz, el que actúa no tanto, porque si bien es fundamental tiene toda otra serie de herramientas.

Van quedando pocos o ningún crítico de teatro, de artes en general, una porque un crítico no solo se forma estudiando, sino viendo obras. Y como vivimos una era digital y el que escribe es uno más del montón, mal pago. Los periodistas como otras profesiones se han tenido que reinventar.

Anoche fui a ver una obra de teatro, de vuelta a casa hubiera puesto una estrella. Luego lo pensé mejor, en considerar a todas esas personas, incluídos tres niños, que si bien no hablaron, representaban en una contra escena, a los personajes cuando estos eran pequeños.

Es doblemente loable hacer teatro en el tercer mundo. En el primero, allí se manejan otros parámetros, está registrado y puede hasta cobrar un seguro de desempleo. El actor teatral, que vi anoche se va muchas veces con la única recompensa del generoso aplauso.

(rosi12)