GALERÍA CON FOTOS DE ESTUDIO
El valor de las viejas fotos de estudio
reside tal vez en los ojos grandes, negros, oscuros o transparentes,
y las melenas rizadas y también onduladas, rostros de mejillas
prominentes, jovencitos pizpiretos o también melancólicos
ya en el presente arruinados, hábitos escolares
por detrás del impecable centro de mesa,
ojos curiosos que miran más allá de la cámara.
Con pañuelos, toquillas, en el límite
de la pubertad, aunque todos los rostros parezcan
mirar hacia más allá del objetivo
en un intento muy terco, se desentienden de todo,
y solo se muestran atentos a lo que puede quedar
al otro lado. Fotos de comuniones, de bodas
en una selección de circunstancias típicas
en la sociedad del momento. Y también un perro mascota,
y unos labios entreabiertos bien definidos,
unas orejas pequeñas pero bien moldeadas
en el último caso.
Gaspar Jover Polo