De aquí pa’ lla’
Solo de algo no me he de olvidar
El mate y la bombilla son parte de mi ser natural
Entrelazado en mis curtidas manos
No me ha de faltar
en la mateada matinal
Me he ido y también he vuelto
a donde el cobijo es de verdad
el amargo calientito siempre estuvo
pa’ ayudarme a despertar
con un buen cebador dando consejos
para luego razonar
O el silencio compañero de esas tardes frías
que con dos sorbos cortitos
el buen mate me abrigará
Largo historial tiene este mate…
Heredado de Don Musta
que desde arriba nos observa sin chistar
Y entregado por sus tres gurisas
que con dulce dolor
unas lágrimas han de derramar
De mano en mano fue pasando
sin quejarse ni discriminar
Si este mate se le diera por hablar
a más de un corazón delataría
a esos que no se han animado declarar
confidente de secretos
que algunos son mejor olvidar
Que más contarles de este Mate…
Mejor cerrar este relato con una frase de Atahualpa… eso si!
solo pa’ los que entienden un poco más allá
“Para el que mira sin ver, la tierra es tierra no más”
A no entretenerse tanto…
Que la pava ta’ por hervir y unos ricos amargos vamo’ cebar…