Asklepios

Apareció en el desierto más desierto

Apareció en el desierto más desierto:

el que ni ausencias tiene; donde no cabe,

-no entran, no pueden-, las bienvenidas y

no responde, -no hay-, un adiós para las

madrugadas, pues jamás han logrado construirse

una imagen definitiva; donde la noche es tan

inexacta como el envejecer del tiempo;

donde los límites de la vida rasgan,

con mucha sed, cualquier otro posible

escenario.